Todos sabemos lo importante que es proteger a nuestros hijos del sol, la deshidratación o el riesgo de ahogamiento. Sin embargo, hoy hablaremos de un aspecto de seguridad veraniega que, a menudo, pasa desapercibido: la seguridad ante los “bichos”. A los bichos (cualquier insecto, especialmente volador) les encanta el buen tiempo tanto como a nosotros, pero una mala picadura puede arruinar la diversión de nuestros pequeños en vacaciones. Desde nuestra clínica queremos alertarte sobre todo lo que debes tener en cuenta a la hora de lidiar con bichos en verano.
Reacciones alérgicas
Es importante vigilar a los niños cuando les pica un insecto para asegurarnos de que no tengan una reacción alérgica anafiláctica o una reacción peligrosa de rápida progresión. Las reacciones graves se atribuyen más comúnmente a las picaduras de abejas, avispones o avispas. Si observas alguna de las siguientes reacciones después de una picadura, es probable que tu hijo tenga una reacción anafiláctica y en ese caso recomendamos llamar al número de emergencias sanitarias 061:
- Hinchazón de cara, lengua y labios
- Dificultad para respirar
- Opresión en la garganta
- Vómitos
- Desmayo o aturdimiento
Vestimenta apropiada
Si vas a llevar a tus hijos a una zona boscosa o de campo, vístelos con manga larga, pantalón largo y una gorra para protegerlos contra las garrapatas. Los colores claros son los mejores para poder localizar cualquier insecto sobre la ropa. Intenta evitar los colores demasiado brillantes para no a trae a las abejas. A la vuelta de la excursión, lo mejor es un buen baño y una revisión corporal exhaustiva para localizar garrapatas en:
- Cabeza
- Orejas
- Cintura
- Ombligo
- Brazos
- Piernas
Si tienes mascotas, revísalas también regularmente en busca de garrapatas.
Aléjate del agua estancada
El agua estancada es un caldo de cultivo para la proliferación de los temidos mosquitos tigre. Vacía los cubos de agua o las piscinas infantiles con regularidad para evitar que se conviertan en el patio de recreo de estos bichos.
Ten a mano el repelente de insectos
Si sus hijos suelen jugar en el campo, cerca del agua estancada o en zonas donde pueda haber bichos, rocíalos con un repelente de insectos. Los repelentes de insectos contienen DEET (N,N-Dietil-meta-toluamida) y solo deben usarse cuando sea necesario, pero son importantes para prevenir enfermedades relacionadas con insectos. La AEP no recomienda repelentes de insectos con DEET para menores de 2 meses, y recomienda que se evite en la medida de lo posible en menores de 2 años (en estos casos se prioriza el uso de mosquiteras).
Los repelentes de insectos de venta en farmacias contienen desde un 15% hasta un 45% de DEET, por lo que hay que asegurarse de leer bien las instrucciones de uso para poder aplicarlo correctamente según la edad.
También puede Interesarte: