Este mes en AI PEDIATRÍA queremos concienciar sobre la importancia de un corazón sano a cualquier edad. Para ello, los padres deben educar a sus hijos en formas efectivas de cuidar su salud cardiaca con una alimentación saludable y ejercicio. A continuación, te ofrecemos maneras fáciles de mantener sano el corazón de toda tu familia:
Pásate al grano integral
El paso más sencillo hacia un corazón sano es pasarse al grano integral. Puede que tus hijos ni siquiera noten el cambio en la pasta, pan, arroz, e incluso la harina. Cambia la harina blanca procesada por opciones integrales más nutritivas.
Cómete el arcoíris
La fruta y la verdura son el mejor comienzo para empezar a cuidar el corazón. Además, todos sabemos que a los niños les encantan los colores brillantes. Busca recetas que sean coloridas y variadas para que tus hijos apenas noten que están comiendo frutas y verduras llenas de nutrientes y vitaminas.
Pescado azul
Es el pescado más recomendable por su alto aporte en omega 3 y, además, se captura cerca de nuestras costas. Una buena idea para prepararlo es rebozarlo con harina de garbanzo, pues es una legumbre rica en ácido fólico.
Zanahorias fritas
Una alternativa más saludable para las omnipresentes patatas fritas son las zanahorias fritas. Tienen un sabor algo más dulce, pero sin duda son la opción perfecta para cuidar el corazón de tus hijos. Prepara las zanahorias con alguna especia y seguro que a tus hijos les encantarán estos saludables snacks.
Mantequilla de cacahuete
La mantequilla de cacahuete es un alimento que contiene grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas que son buenas para el corazón. Este tipo de grasas ayudan a reducir el colesterol “malo”, por lo que comer este alimento con moderación es bueno para la salud cardiaca.
La clave para enseñar a tus hijos cómo mantener un corazón saludable es la educación a una edad temprana. Recuerda que, si haces partícipes a tus hijos en la toma de decisiones, serán más receptivos a la hora de tomar buenas elecciones de comida saludable.